Es la tercera parte de la Operación Manto Verde, una investigación que suma 750 kilos de la sustancia ilícita y 11 imputados por una serie de delitos vinculados al tráfico de drogas en la provincia de Limarí.
Con una orden de entrada y registro, llegaron nuevamente a Punitaqui, los detectives de la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado de La Serena para terminar la tercera parte de la Operación Manto Verde, que este año desarticuló una banda que se dedicó a cultivar, producir, procesar y distribuir cannabis.
Esta vez, el trabajo policial se concentró en una caballeriza, donde fue clave el aporte de los ejemplares de la Brigada Canina de la PDI. “Hulk” y “Gary”, son perros labradores especialistas en la detección de drogas y, una vez más, demostraron sus dotes al encontrar el punto exacto para desenterrar lo último que quedaría de la millonaria producción de una banda criminal.
“Detectives de esta unidad, con palas y un chuzo comenzaron el trabajo para excavar en una bodega de fardos. A un metro de profundidad aproximadamente, logramos dar con el acceso a una fosa séptica horizontal, adaptada como un centro de acopio subterráneo. Así comenzamos a extraer los bolones que en total sumaron 269 kilos de cannabis procesada, lista para su comercialización”, señaló el Comisario Miguel Cabezas, jefe de la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado de La Serena.
Con esta tercera incautación, la Operación Manto Verde, suma 750 kilos de cannabis, que fueron destruidos y sacados de circulación por la PDI, lo que habría significado unos 3.750 millones de pesos de ganancias para los integrantes de esta banda delictual, que demuestra una mayor capacidad en su cadena de producción y distribución, además de un alto poder de fuego.
“Durante esta investigación se ha podido establecer que los integrantes no pertenecen solo a un clan familiar. Hay toda una estructura con distintas personas que trabajan para esta organización, cumpliendo distintos roles, no solo en la cosecha y en los cultivos, sino también en la protección. Lamentablemente estamos enfrentados a una realidad que va más allá del ultivo sino que hay toda una logística y con alto poder de fuego, donde no solo tenemos incautación de armas o municiones, sino también explosivos”, señaló el Fiscal de Ovalle, Carlos Jiménez.
Un hombre mayor de edad, fue detenido en este tercer procedimiento y quedó a disposición de la fiscalía para su formalización por tráfico de drogas. A un año de la investigación, la Operación Manto Verde suma 11 imputados en total, entre financistas, brazos operativos para la protección y cuidado de los cultivos, receptores de la droga, entre otros, incautando además diversas armas de fuego, municiones, explosivos, dinero en efectivo, entre otras especies.
“Ha sido un proceso investigativo largo porque abarca toda la cadena, desde el cultivo hasta estos bolones. Esto significa que estaban bastante bien estructurados, con armas y explosivos, que además delata el grado de organización delictual que hay detrás de esto. El Gobierno siempre está pensando y evaluando cómo ayudar en esta gestión para ser mucho más efectivos porque es una amenaza importante para nuestra sociedad”, señaló el Delegado Presidencial de Limarí, Iván Espinoza.
Una organización que hoy queda desarticulada por completo luego del trabajo de la PDI con el Ministerio Público. Además de Punitaqui, esta investigación terminó con resultados efectivos en Ovalle, Combarbalá, Manquehua y también en la Región Metropolitana.